Todos nuestros Fundadores tuvieron la genialidad de leer los signos de los tiempos, discerniendo lo que los hombres y mujeres de su tiempo demandaban, y dieron una respuesta creativa y DIÓ lugar al nacimiento de la Familia de la Anunciación.
" La dulzura es cuestión de equilibrio, es humilde dependencia hacia Dios, es una actitud, un comportamiento, dominio de si mismo. modesta y amable, indulgente con los hermanos"